ARRASATE
Un prototipo busca espolear el debate ciudadano y pulsar la opinión pública sobre su diseño.
La rotulación del nomenclator de las calles del casco histórico podría experimentar un cambio a mejor si prospera la iniciativa planteada por algunos funcionarios municipales de forma particular. Estos, aburridos de ver las mismas viejas placas azules de aluminio desde 1980, encargaron a modo de prueba el diseño de un nuevo rótulo cuyo prototipo se exhibe desde hace algunos días en la embocadura de la calle Erdikokale desde el Portal de Abajo (portalón).
La firma de rotulaciones Zaldibar, dirigida por los hermanos Dolara, ha diseñado este modelo experimental que el encargado de la Brigada de Obras José Ramón Uribarren colocó inmediatamente «para suscitar el debate ciudadano y pulsar la opinión pública» a este respecto. Detrás de esta iniciativa está el funcionario de Secretaría del Ayuntamiento Jose Mari Balanzategi 'Aizkora', encargado de los registros municipales.
El nuevo rótulo callejero de prueba diseñado por los hermanos Dolara ha sido bien acogido por los contados ciudadanos que se han apercibido de su existencia.
Las opiniones recabadas coincidían con los promotores de esta iniciativa innovadora en que las viejas placas azules de aluminio «están ya muy deterioradas, en algunos casos hasta el extremo de imposibilitar su lectura. Además, con su anodino diseño, no guardan absolutamente ninguna armonía con el estilo urbanístico del casco histórico, cuya conservación tan rigurosamente ha exigido el Ayuntamiento a comerciantes y particulares».
Otros mondragoneses alababan la belleza del diseño y la claridad y legibilidad de la rotulación. La tipografía de letras claras y grandes era agradecida especialmente por los ciudadanos de más edad.
Escudo alado
El diseño realizado por los hermanos Dolara se basa en una orla ovalada coronada por el escudo de la villa, en su versión 'modernizada'.
Unas alas extendidas soportan el emblema municipal. Estas, según Enrike Dolara, corresponderían al mítico dragón que da nombre a la villa, lo que conjuga elementos decorativos con alusiones a la mitología local.
Esteban y Enrike Dolara, autores del diseño y del prototipo que se exhibe en la calle del Medio, optaron por el óvalo tras estudiar y analizar los modelos empleados en la rotulación de otras localidades y ciudades. El óvalo «brinda mayores posibilidades decorativas que el rectángulo, mucho más limitado desde el punto de vista estético», aseguraba Enrike.
Fue así como concibieron esta orla ovalada de 740 milímetros de ancho por 680 de alto, suficiente para dar cabida en su interior a los nombres más largos.
En el caso del prototipo experimental, el nombre de la calle viene rotulado sobre una chapa de acero inoxidable. Y la orla está confeccionada en madera dm, una especie de pasta o aglomerado al que se le ha aplicado una acabado en negro antracita para darle un aspecto ferrítico a imitación del hierro fundido. Pero este rótulo prototipo carece de cualquier otro tratamiento para permanecer a la intemperie, lo que le augura una corta vida.
La justa para suscitar el debate ciudadano en torno a los aciertos y desaciertos de este diseño ovalado caracterizado por el escudo alado que lo corona y por los elementos ornamentales que exhibe tanto en el pie como en los laterales.
Ni su diseño, ni el material con el que podría fabricarse, ni el color o características de la rotulación de los nombres han sido definidos aún.
Los mondragoneses tienen ahora la palabra sobre todos estos aspectos, aunque la decisión última corresponderá a la Corporación.
Los promotores de esta iniciativa son conscientes de que «no corren los mejores tiempos» para embarcarse en la tarea de rediseñar y reemplazar la vieja rotulación callejera, aunque sólo sea la del casco histórico.
Extender esta iniciativa a las 141 calles y avenidas que constituyen hoy por hoy el casco urbano de la localidad está sin duda fuera de cuestión. Pero los impulsores de esta iniciativa consideran dentro de lo posible que el Ayuntamiento se avenga a cambiar la rotulación en las calles Erdiko kale, Iturriotz, Ferrerías, Zerkaosteta y Olarte, en los cantones de Olarte, Zurgin, Arotz y Kontzezino, en el paso de Kanpantorpea y en la plaza Jose Letona.
Rotulación de cerámica
La rotulación que en la actualidad lucen en las calles de Arrasate data de 1980, y corresponde a la fecha en que la Corporación Municipal aprobó el nuevo nomenclátor en euskara. Las denominaciones de calles y avenidas con reminiscencias franquistas fueron suprimidas y se acordó rebautizar oficialmente con su denominación euskaldun a todas las calles de la villa. La resolución consistorial se materializó en la colocación de una rotulación a base de placas de aluminio con fondo de color azul que aún perdura. Esta nueva rotulación, tan funcional como anodina, reemplazó a la anterior de cerámica, de carácter artesanal y artística. Aún se pueden apreciar restos de aquella antigua rotulación de cerámica que el Ayuntamiento encargó a una casa de Castellón. Por ejemplo, en la confluencia de Nafarroa etorbidea con Etxe Txikiak, donde aún se lee «Calle de la Virgen de Aránzazu».
