El ´callejero pirata´ sigue ganando adeptos entre los vecinos del casco histórico, cuyos representantes están de acuerdo con el Ayuntamiento en que no se eliminen los letreros
En cuestión de semanas, los rótulos del callejero pirata han acabado por integrarse en el entorno del casco histórico. Aunque cada día descubrimos letreros nuevos (ya vamos por 21), su autoría sigue sin conocerse, por lo que entre muchos curiosos permanece el misterio sobre el significado que pudieran encerrar (o no) las indicaciones aparecidas en distintas calles de la ciudad y que rondan ya la veintena de nombres.
Hasta la fecha, según los representantes vecinales de las zonas rotuladas, no ha habido quejas. Más bien al contrario. Según Juana Pérez, presidenta de la asociación de vecinos La Axerquía, "nadie ha protestado, la acción se ha tomado como algo anecdótico y ha despertado incluso la simpatía y el interés de la gente por averiguar de qué va la historia".
En la misma línea, se manifestó ayer el presidente de la asociación de la calle Alfaros, Jerónimo Carrillo, quien explicó que no ha habido reacciones ni a favor ni en contra. "Mientras se encuentren en fachadas particulares, me parece bien que sean los propietarios quienes decidan si borran los letreros o no", comentó, en relación a la decisión del Ayuntamiento de no eliminarlos.
En el Alcázar Viejo, según el representante vecinal, Javier Alvarez, la reacción mayoritaria ha sido la de despertar curiosidad. "La gente quiere saber quién es el autor para que nos explique a todos de una vez si los cartelitos significan algo o no", declaró, "personalmente, me parece una iniciativa cómica que se ha hecho de forma limpia y que no resulta ofensiva". Algo similar comentó al respecto el presidente del Consejo de Distrito, Pedro Antúnez. "
Parece una idea original y espontánea que ha causado, sobre todo, sorpresa entre los vecinos", señaló, "es cierto que los primeros días hubo gente que lo criticó por si podía causar confusión, pero ya se ha visto que no es así y que incluso a los que vienen de fuera les parece algo gracioso". Según Antúnez, "no creo que haya que borrarlos porque no incluyen ningún mensaje ofensivo para nadie y además se han hecho de forma muy pulcra".
La única voz discordante entre los vecinos ha sido la de José Rojas, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos Al Zahara, que aunque reconoce que nadie se ha quejado, considera que no es serio que se dé a entender a la ciudadanía que cada cual puede pintar lo que le parezca en la fachada del vecino.
"En mi opinión, habría que borrar los letreros porque si no, se va a sentar un precedente que no conviene a una ciudad que aspira a ser capital cultural". Asimismo, señaló que "no estaría de más habilitar espacios públicos de expresión".
vía diariocordoba.com.
